Barra

RUTA A LA BRETAÑA 3ª Parte: Vannes → Carnac → Lorient → Concarneau.

RUTA A LA BRETAÑA 3ª Parte: Vannes → Carnac → Lorient → Concarneau.

Nuestra próxima parada era Vannes, el buen tiempo de momento nos estaba acompañando y ya era raro por la época del año en la que estábamos. Vannes es una ciudad grande y como no era de esperar no nos lo iban a poner fácil para aparcar la autocaravana, estuvimos buscando un aparcamiento cerca de la ciudad pero era imposible, al final aparcamos cerca de un embarcadero en el que había un parking enorme para autobuses y como que vimos alguna autocaravana mas allí nos pusimos con la esperanza de no encontrarnos el regalito en el cristal cuando volviéramos y tuvimos suerte, supongo que en otra época del año debe de estar mas vigilado. La verdad es que intentamos entrar en un area de autocaravanas pero estaba mucho mas lejos de donde la dejamos aun así creo que habría unos 5 kilómetros hasta la entrada de la ciudad pero siguiendo el curso del embarcadero se nos hizo menos corto bueno mas llevadero.

VANNES





Al inicio del puerto deportivo en la parte mas alejada de la ciudad las embarcaciones estaban bastante separadas unas de otras pero según nos íbamos acercando a la ciudad los "codazos" entre ellas :-) eran evidentes.


Vannes es una localidad y comuna francesa, capital del departamento de Morbihan, en la región de Bretaña. La población de Vannes supera los 50.000 habitantes, los habitantes del área urbana alcanzan los 140.000.





Aun no habíamos llegado a la entrada de Vannes y las casas casi todas del siglo XVI con entramado de madera hacían acto de presencia, a cual mas bonita y bien conservada.








Nuestra intencion era visitar el casco antiguo de Vannes y para ello la mejor manera era entrar por la puerta de Saint-Vincent, que fue clasificada como monumento histórico el 28 de julio de 1928, es sin duda alguna la más prestigiosa de las seis puertas de la ciudad aún visibles. Se abrió entre 1620 y 1624 en la muralla que cierra la ciudad al sur, frente al puerto.



 En 1747, corroída por el salitre, fue restaurada por el ingeniero Duchemin, quien conservó la fachada barroca antigua. La estatua actual de San Vicente Ferrer, patrón de la ciudad, fue colocada sobre la puerta en 1891. Ese mismo año se decoró la parte central con el escudo de armas de la ciudad.


Subimos por la Rue Saint Vincent que es el centro neurálgico del casco antiguo.




Las casa de entramados siguen siedo muy visibles por todo el casco antiguo.


Entre las murallas podemos ver el castillo de l’hermine, (armiño) el símbolo del ducado de Bretaña, se construyó en el siglo XIV como residencia de los duques de Bretaña. Incluso se alojó en sus habitaciones el rey Francisco I. Pero no es ése el edificio que se ve hoy en día: la mansión actual se construyó en el siglo XVIII. La incorporación del ducado a la corona francesa hizo que el castillo se abandonara y sus piedras se usaran para la construcción del puerto. En la actualidad, se utiliza como sala de exposiciones temporales.


Los jardines del castillo se encuentran donde se ubicaban los fosos medievales de la muralla, aquí tenían lugar los torneos organizados por el duque de Bretaña. La delicadeza del jardín a la francesa y muy bien cuidados por cierto contrasta con la historia de un lugar con multitud de sangrientas justas y batallas.












Paseando por las pequeñas calles de Vannes llegamos hasta la catedral de San Pedro, situada sobre la colina de Méné, está clasificada como Monumento Histórico desde el 30 de octubre de 1906 y domina la ciudad amurallada. La reconstrucción de esta catedral románica comenzó en el siglo xv, ya que era demasiado vieja y pequeña para el peregrinaje de la época a la tumba de San Vicente Ferrer, fallecido en Vannes en 1419 y enterrado en el coro de la catedral. Alberga igualmente uno de los primeros ejemplos de la penetración del estilo renacentista en Bretaña. En el siglo xix, el mal estado del edificio obliga a reconstruir la fachada occidental en estilo neogótico.




















Al salir de la catedral volvimos hasta la salida de el casco antiguo de Vannes y las casas de entramado de madera seguían maravillándonos, a lado y lado de las calles y todas muy bien conservadas.





Pusimos aquí punto y final a nuestra visita a Vannes, conscientes de que hay muchas cosas mas por ver la verdad es que nos gusto mucho esta visita, nos esperaba ahora un largo camino andando hasta la autocaravana. Nuestro próximo destino Carnac.

Llegamos a Carnac a primera hora de la tarde y pudimos aparcar bien justo a la entrada de la oficina de informacion de Carnac.

CARNAC


Decidimos coger el Tou que hacen desde un mini autobus que es guiado en varios idiomas entre ellos el castellano, si no recuerdo mal eran unos 8 euros por persona.


Carnac es una comuna y población de Francia situada en el departamento de Morbihan en la región de Bretaña. La comuna es famosa por los Alineamientos de Carnac, con 2934 menhires.






Carnac es conocido porque es el yacimiento prehistórico que cuenta con la mayor riqueza de megalitos y dólmenes del mundo, casi 3000 menhires que fueron construidos por las poblaciones neolíticas entre el año 6000 y 2000 A. C.





Estos alineamientos están compuestos por cuatro zonas o agrupamientos diferentes: Le Ménec con 1099 menhires, Kermario con 1029 menhires, Kerlescan con 555 menhires y Le Petit Ménec con 100.




Muchos de los hallazgos entre los alineamientos de Carnac se encuentran en el museo prehistórico de la localidad.


Bueno, hasta aquí lo que dice un poco la historia de los alineamientos de Carnac, según comentan con una distancia de unos 10 km de largo. Atendiendo a las explicaciones de la guía turistica no hay nada demostrado... sinceramente no nos quedo muy clara su real procedencia, lo que si que es evidentemente  un reclamo turístico, vale la pena la visita? si pero tampoco nos impacto demasiado (cada uno tiene su opinión :-) ).


Nos dirigimos a nuestro próximo punto que era Lorient pero pernoctaríamos en Ploemeur, en un sitio habilitado por el Ayuntamiento sin ningún tipo servicio pero en el que esta permitido pernoctar, es gratuito, es un sitio muy tranquilo, hay espacio para unas 6 autocaravanas.

PLOEMEUR






Nos desplazamos a pie un par de calles para ver el mar y las playas, la marea estaba baja y pudimos acceder al "Fort de keragan dit Fort Bloqué" solo es accesible con la marea baja y no se puede visitar por dentro ya que es privado, solo se puede rodear, el acceso es un poco difícil ya que con la marea alta se cubre totalmente el camino y es de roca viva.


Por la mañana pasamos con la autocaravana por el mismo sitio, el camino y la playa ya habían desaparecido engullidos por la marea alta.


Lorient era nuestro destino de hoy, llegamos por la mañana temprano y no encontramos problema para aparcar ya que donde íbamos es zona portuaria y hay mucho espacio.

LORIENT



Nuestra intención no era visitar la ciudad si no la base de submarinos de Lorient, también conocida como base de submarinos de Keroman, es un complejo de búnkeres construidos por la marina alemana durante la Segunda Guerra Mundial. Ocupa el extremo de la península de Keroman, con acceso directo al estuario de Lorient y al océano Atlántico.



Según Wikipedia la base de Lorient fue construida entre 1941 y 1944 durante la ocupación alemana de Francia, fue destinada a albergar la 2ª y 10.ª flotilla de U-boot de la Kriegsmarine y formó parte del llamado Muro del Atlántico. Su importancia fue la causa de la destrucción de la ciudad de Lorient por los bombardeos de la aviación británica y estadounidense de enero y febrero de 1943, y de la resistencia alemana en la llamada bolsa de Lorient hasta el 10 de mayo de 1945.





Sinceramente los edificios impresionan por su tamaño, por su construcción y por la historia que tienen detrás de ellos.


Tras la Segunda Guerra Mundial la marina francesa ocupó a su vez la base, que estuvo en activo hasta 1997. Desde entonces el lugar se ha convertido en un centro náutico especializado en la navegación deportiva y de ocio (Ciudad de la Vela Éric Tabarly), si bien una serie de museos recuerdan el pasado militar de la base de submarinos de Lorient y permiten la visita de uno de los búnkeres y del submarino de clase Daphné "Flore".




Aun se conservan un par de barcos hundidos durante la segunda guerra mundial a pocos metros de la base de Lorient.







Durante nuestra visita coincidió que estaban atracados en los muelles los integrantes de la Copa del Mundo de vela, realmente son espectaculares, alguno de ellos aprovechan la ocasión y son reparados dentro de los hangares del recinto eso si bajo total secreto ya que intentamos hacer una foto al lado de un mástil partido por el empuje del viento y muy amablemente un vigilante nos comento que no podíamos hacer fotos de la avería que habían sufrido.





El centro de la base de submarinos lo constituyen tres enormes búnkeres, el Keroman I, II y III, que podían proteger cada uno entre cinco y siete U-boot bajo sus techos de hormigón de una decena de metros de espesor a prueba de bombardeos. Existe un cuarto Búnker, el Keroman IV, que nunca llegó a terminarse, debido a los continuos bombardeos aliados que cortaron la línea de suministros necesarios para su construcción. La parte subterránea de todos los búnkeres, estaba conectada con el exterior, mediante un complejo sistema de túneles, responsables del suministro de provisiones, combustible, armamento y piezas necesarias para el mantenimiento de los U-Boot. El tiempo de construcción para cada búnker era de 7 meses aproximadamente.


Además existen dos "dom-búnkeres"​ en el puerto de pesca de Keroman y un búnker situado en Lanester. Para proteger la base desde el mar se realizaron importantes fortificaciones en otros puntos cercanos como Port-Louis, Gâvres o la isla de Groix.





En la parte trasera de los bunquers hay un submarino, y bastante armamento expuesto al publico y bombas de la segunda guerra mundial, el submarino que se puede visitar se conserva en muy buen estado y está justo al lado del museo naval de Lorient.

















El tamaño de los hangares "bunker" es descomunal, con las mareas bajas el agua desaparece de los hangares y con las puertas de contención podían evitar la entrada de agua con las mareas altas y asi  construir o reparar los submarinos.







En algunas de las calles y edificios aun son visibles los impactos de los bombardeos durante la segunda guerra mundial y al ser los edificios de dimensiones descomunales estos bombardeos les provocaban muy pocos daños a las infraestructuras.



Durante su construcción cientos de obreros perdieron la vida por los continuos bombardeos que sufrian por parte de los ingleses y americanos para evitar su construcción, ya que Lorient estaba en un punto de la costa muy estratégico.




Una vez visto todo el recinto de Lorient volvimos a la autocaravana y nos pusimos en marcha para ir hasta nuestro próximo destino: Concarneau.

CONCARNEAU



Llegamos a Concarneau a medio día, nos temíamos que nos pasaría como en las otras grandes ciudades que habíamos visitado y es que nos mandan al quinto pino para poder aparcar la autocaravana pero aquí no fue así aquí nos permiten aparcar en el primer parking que hay en el centro de la ciudad y no se bien el motivo pero los siguientes parkings tienen las barreras de altura y estaban prácticamente vacíos.


Concarneau es un ciudad y comuna francesa del departamento de Finisterre, en la región de Bretaña.



Nuestra intención era visitar la llamada "Ville Close", un islote de 380 metros de longitud por unos 100 de anchura completamente rodeado de murallas, accesible desde tierra firme por un único lugar y que constituye el antiguo centro histórico, es el principal atractivo turístico de Concarneau aunque evidentemente tiene muchos otros mas..




Según cuenta la historia Concarneau surgió en la Alta Edad Media sobre una pequeña isla accesible a marea baja que dominaba una pequeña bahía, lo que ofrecía una protección natural tanto para los habitantes como para las embarcaciones. Su situación privilegiada favoreció su desarrollo, adquiriendo en el siglo XIII y a principios del siglo XIV su aspecto actual rodeado completamente de murallas. Durante la Edad Moderna Concarneau albergó una guarnición militar permanente y una población pesquera, siendo sus murallas mejoradas por Vauban entre 1680 y 1694.






Dos puentecillos abren las puertas de las murallas. La arteria principal es la calle Vauban que está rodeada de casas encantadoras con carteles a tono con la época de la ciudadela. Por los lados nacen calles adoquinadas que se escapan hasta las aberturas que dan al puerto pesquero.








Con la Revolución industrial la ciudad se transformó y empezó a expandirse fuera de las murallas con la construcción de casas para la burguesía a lo largo de los muelles exteriores. A mediados del siglo XIX aparecen las primeras conserverías especializadas en la sardina y en el atún, colocando al puerto de Concarneau como uno de los más importantes de Francia. Hacia 1900 la ciudad cuenta con 30 conserverías que emplean a unas 2000 personas (de una población total de 7000 habitantes). Esta actividad irá declinando tras la Segunda Guerra Mundial, si bien Concarneau sigue siendo hoy en día un importante puerto pesquero (primer puerto francés para el atún y sexto para la pesca de bajura) con un importante sector de construcción naval. A estas actividades se une su interés turístico, surgido desde finales del siglo XIX cuando se estableció en la ciudad una importante comunidad de pintores.












La rue Vauban es la calle principal de Ville Close y la Place Saint-Guénolé es el centro neurálgico de la ciudadela. Casi todas las casa que vimos son de piedra, pero también se pueden encontrar algunas con el típico entramado de madera. Todas son muy bonitas y están muy bien cuidadas, con flores y redes de pesca decorando las fachadas y casi todas con el color azul predominante.




La muralla es accesible a pie y rodea casi todo el pequeño islote, desde las murallas tenemos unas vistas impresionantes tanto del casco antiguo como de la ciudad moderna de Concarneau.








Como en otros sitios que hemos visitado las mareas influyen muchísimo en el aspecto que tienen, este en particular cuando hay marea baja se queda totalmente rodeado de playas de arena dándole otro aspecto muy bonito, nosotros cuando lo visitamos había marea alta y el contraste por lo que hemos visto en otras fotos del lugar es impresionante,


Nos tomamos un merecido descanso para recuperar las energías, nuestro próximo destino en la ruta será Locronan.


No hay comentarios:

Publicar un comentario